Ignacio Casero Lucas, un artista, la obra y el público y el “no sé” de sus cuadros

“Tengo que seguir trabajando, esforzándome y no parar porque no quiero ser de los que me quede en el camino” 

Laura Figueiredo (25 de septiembre d 2020).- Lleva un tiempo en el mundo del arte dando pasos para formarse y crearse como artista. Un trabajo que exige en primer lugar tener muy clara la apuesta y estar decidido a no ser uno de los muchos que se quedan en el camino. Terminó sus estudios de Bellas Artes en la Universidad de CLM en el campus de Cuenca, hizo un máster relacionado con las artes visuales y ahora trabaja en su tesis doctoral con un tema tan presente en la vida como es el fracaso. A la vez pinta en su pequeño espacio convertido en estudio en su pueblo, Campo de Criptana.

Es Ignacio Casero Lucas y este verano nos acercó su trabajo en una exposición en El Pósito bajo el título “No sé”. Y es que nuestro pintor nos asegura que pocas veces sabe lo que va a pintar más allá de alguna ligera idea. Una vez terminado el cuadro surge el título y una ventana abierta para que el público observe y aporte su propia versión o ni siquiera eso, simplemente le guste o no le guste. Como Ignacio nos dice “parece que nos empeñamos en que todo cuadro tiene que tener una explicación y no. Un brochazo puede ser un simple brochazo y ya está”. El caso es que hasta El Pósito, el hijo de Sebastián Casero y Mari Tere Lucas, trajo una amplia colección de cuadros de gran tamaño pintados en acrílico y cera sobre papel con títulos en su mayoría monosílabos como “Playa”, “Cerdo”, “Narizón”, “Embarazada o “Culo”. Cuadros que precisamente en su momento fueron un fracaso ya los que les da una segunda oportunidad para convertirse en logros.

En la cabeza de Ignacio las ideas y proyectos se suman sin hacer ruido, de una forma serena y parece que ordenada pero siempre con el empeño y la fuerza de quien quiere seguir creciendo como artista. Sabe que necesita tiempo y por delante tiene mucho trabajo pero paso a paso…

La entrevista fue realizada en El Pósito, uno de los días en los que Ignacio Casero expuso en Campo de Criptana (del 18 de julio al 2 de agosto)

 

-El tema de tu tesis doctoral es el fracaso ¿algo muy presente entre los artistas?

Yo creo que sí, entre los artistas y en general porque todos en algún momento y en algunos aspectos nos sentimos fracasados. Eso yo creo que está presente en casi todo el mundo. Yo no me voy muy lejos y aplico la perspectiva desde mi propio fracaso y desde ahí lo extrapolo a los fracasos de la gente y siempre con un toque de humor.

-Humor es el que muchos tenemos que poner al ver una obra de arte y tragar las explicaciones.

(Jejeje) Es que una obra de arte no tiene una explicación, tiene muchas o ninguna. Pero, al margen de ello, te aseguro que más humor tiene que poner el artista porque si fracasas y encima te da la bajona… El humor se hace imprescindible.

“En el artista el sentido del humor se hace imprescindible”

-¿De qué fracasos estamos hablando?

Haces un cuadro y no te sale, no aciertas; una exposición que no logras organizar; esa asignatura que no sacas como tú piensas y esperas…en fin fracasos que todos conocemos y que hay que tomarlos con humor y seguir trabajando en ello.

-Nos centramos en esta exposición bajo el título “No sé” ¿sabes lo que has traído?

Pequeños fracasos que mirados de otra forma han sido pequeños logros o pequeños no fracasos. Son cuadros fracasados que los repinté y ahora son otra cosa y creo que ya no son fracasos y no sé si son logros.

-¿Son cuadros con una segunda oportunidad?

Es rehacer nuevamente unos cuadros para que acaben siendo aciertos.

-Vaya trabalenguas ¿Prefieres entonces que el público descubra si son o no logros?

¡Hombre claro! Pienso que tiene que ser una especie de discusión entre el artista y el público. Esto no es un monólogo, cada cuadro lanza sus premisas o frases… por ejemplo yo hago una propuesta de título y cada uno puede dar uno nuevo.

-Y cuando empiezas a pintar ¿sabes lo que quieres pintar?

No, de ahí el título de la exposición “No sé”. Tienes unas ideas en mente. A veces son un cuadro, algo que has leído… pero son solo ideas vagas, nunca hay nada claro. Otras veces no tienes ni idea y pintas.

“Cuando empiezo a pintar un cuadro no sé lo que voy a pintar. Como mucho tengo ideas vagas”

-¿Estamos preparados en general en Criptana para este tipo de diálogo con el cuadro?

Pues ha habido gente que me ha sorprendido mucho y gratamente. Gente que me dice “qué bien que ya no hay molinos” y es que la mayoría buscamos lo que nos identifica. Hay gente dispuesta a ver otras cosas e incluso a buscar ese molino en estos cuadros  y lo mismo hasta lo encuentra aunque yo no soy consciente de haberlo pintado.

-Malos tiempos para el arte en plena pandemia.

Puede ser, la pandemia nos ha parado en el arte y en todo. Es un tropiezo pero también es una oportunidad para crear y que con el tiempo lo podremos ver.

“La pandemia es un tropiezo pero también es una oportunidad para crear y que con el tiempo lo podremos ver”

-¿Cómo ves el futuro?

Pues que tengo que seguir trabajando, esforzándome y no parar porque no quiero ser de los que me quede en el camino. Somos muchos los que salimos de las universidades con el título de Bellas Artes pero muchos también quienes abandonan.

“Tengo que seguir trabajando, esforzándome y no parar porque no quiero ser de los que me quede en el camino”

-¿Y apuestas por la pintura?

Pero no descarto otras cosas. He hecho dibujos, acciones, me he metido un poco en el relato, vídeos, pequeños comics…  Ahora estoy con la pintura, me siento cómodo.

-¿Por qué la pintura?

Pues no sé la verdad… tal vez por comodidad porque es más fácil coger un pincel y un lápiz que un cincel, un martillo y una piedra o más barato que comprarte una cámara. No estoy seguro. Tal vez también estoy en la pintura porque en su momento fracasé con ella y busqué en otras cosas y ahora he vuelto. Me sentí fracasado en la pintura y la retomo.

“Me sentí fracasado en la pintura y la retomo”

-Bellas Artes es muy amplio y ahora parece que se agranda todavía más ayudada de las nuevas herramientas tecnológicas.

Por suerte o por desgracia sí, es amplio.  Casi cualquier pequeña historia puede pasar a ser una obra en sí si le das una buena estructura, forma, lenguaje y lo plasmas bien.

-¿Estamos educados para valorar el arte?

Depende. Hay que mirar dos cosas. Una si disponemos de los medios y dos si estamos dispuestos a acogerlos y a aprender. Ahora mismo hay muchos medios que nos acercan al arte facilitados precisamente, en gran medida, por las tecnologías. El tema está por tanto no solo en esa facilidad de acceder al arte sino también y esencial si estamos dispuestos a aprender.

-¿Todo cuadro tiene una explicación?

Un cuadro u obra de arte en general no tiene por qué tener una explicación y ni siquiera la misma explicación para mí que para ti. Cada uno puede sacar su propia explicación o recordarle una cosa o un sentimiento. Como artista he pensado en una cosa y a la larga te sale o no. Como te he comentado antes no se trata de un monólogo, no es algo cerrado.

-Pues nos empeñamos en buscar una explicación.

Yo creo que sí y no tendríamos que empeñarnos en buscar una explicación. Ni en ver algo, un brochazo puede ser un simple brochazo y ya está. Habrá que disfrutarlo como lo que es, un simple brochazo, ni infravalorarlo ni sobrevalorarlo.

“No tendríamos que empeñarnos en buscar una explicación a toda obra de arte”

-Se trata de que nos guste o no nos guste, sin más vueltas.

Pues para muchos es así y si te gusta te quedas y si no te vas y no pasa nada.

-¿Cuándo sabes que un cuadro está acabado?

Cuando lo has vendido.

-Contento de exponer en tu pueblo.

Pues sí porque es una oportunidad para enseñar a la gente del pueblo lo que estoy haciendo. Además, es un privilegio exponer en El Pósito, es muy chulo. Me gusta mucho.

-Y así que la gente sepa que el chico de Sebastián también pinta.

Por supuesto (risas) y además es que los cuadros no son para encerrarlos, son para enseñarlos. Siempre he tenido el apoyo de mis padres y eso es muy importante.

-Siempre has estado al pie del cañón ayudando a tus padres en la tienda pero veo que te ha dado tiempo a estudiar y hacer muchas cosas más.

Sí, cuando te gusta una cosa sacas tiempo. Sigo ayudando por las mañanas en la tienda y por la tarde a pintar.

-¿Te inspira la tienda?

Pues hubo un tiempo en que me inspiró algún bodegón,  esas frutas que se quedan en el cajón y se enmohecen.

-¿Frutas fracasadas?

Pues puede ser pero que cobran un sentido cuando las llevo a un cuadro.

-¿Cómo ves Criptana?

Culturalmente tiene una gran fuerza en la música pero también hay buenos escritores, pintores… que a lo mejor no son muy conocidos y que se podrían dar a conocer más; primero en Criptana para luego ir saliendo. Criptana si se esfuerza podría sacar más provecho. Hay buena gente y podríamos sacar más buena gente.

“Criptana si se esfuerza podría sacar más provecho. Hay buena gente y podríamos sacar más buena gente”

-¿Hay mucho arte oculto?

No sé si mucho o poco pero hay arte que no se enseña que no sale y se expone. Hay que pintar para los demás y buscar no solo cantidad sino también calidad. Es un tema que hay que pulirlo.

 


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